Ya ha empezado la conversación sobre la reforma migratoria. Debería haber debate en el congreso de E.U.A. dentro de poco. Vale la pena protegernos, informarnos e involucrarnos.
Protegernos: Nadie debería pagar por adelantado un proceso que no existe en la realidad sino en el futuro. En años anteriores durante los debates sobre la reforma, algunos han pagado por procesos que solo existen en teoría. Mejor guardar el dinero en tu propia cuenta bancaria u otro fondo para poder pagar por el proceso verdadero después de la implementación de la reforma. Habrán organizaciones con y sin fines de lucro dispuestas a ayudar en ese momento.
Informarnos: El desafío de la reforma migratoria se puede describir con tres preguntas.
1) ¿Cómo debería el gobierno de E.U.A. estructurar su sistema para los que quieren entrar a E.U.A.?
2) ¿Qué mecanismos debería utilizar E.U.A. en las fronteras y dentro del país para mejorar el cumplimiento con las leyes y el respeto por el sistema?
3) ¿Qué debería hacer E.U.A. con los 12 millones de indocumentados que residen en el país?
Opino que los mejores argumentos son los que enseñan la buena voluntad de todos de trabajar en un proyecto común. Aparte, y como en cualquier país de un grado u otro, al final el dinero manda. La inmigración documentada o no suele llevar consigo prosperidad económica. El inmigrante contribuye con sus ideas, esfuerzo y buena voluntad. Vale la pena pensar en ejemplos y contarlos.
Involucrarnos: Los que tienen ciudadanía deberían votar y llamar a sus representantes para expresar sus deseos de una reforma migratoria que trataría con respecto y dignidad a todos, incluyendo a los indocumentados. Los que tienen la residencia debería pensar en conseguir la ciudadanía para poder votar. Escrito eso, yo personalmente entiendo perfectamente que la ciudadanía estadounidense no es el deseo de todos. He vivido en España, Inglaterra y México y guardo cariño por los tres países (Más por supuesto a España y México). La ciudadanía es una decisión personal; sin embargo, piénsalo. Los que están aquí de paso o como indocumentados pueden involucrarse de otras maneras. Para todos, el ejemplo es fundamental. Esforzándonos juntos y sin recriminaciones, podemos conseguir mucho. Y en el esfuerzo, empezaremos a vivir mejor.